¿Qué es el blanqueamiento Dental ?
Uno de los tratamientos más demandados en el ámbito de la odontología estética, sin lugar a dudas es el blanqueamiento dental. Consiste en la aplicación de determinados tratamientos, con la finalidad de reducir varios tonos el color de los dientes, de manera que presenten una apariencia más blanca y brillante.
¿Por qué cambian mis dientes de color ?
Lo primero que debemos de tener en cuenta, es que el diente de manera natural nunca presenta un color totalmente blanco, aunque debido a diferentes estereotipos, se ha llegado a asimilar, de manera equivocada, el poseer una dentadura blanca con tener una dentadura sana. No obstante, es cierto que con el paso del tiempo el color de nuestros dientes se va modificando, adquiriendo éstos una tonalidad más amarillenta. Este cambio se produce de manera natural debido a la propia edad, hecho que se manifiesta sobre todo a partir de los cincuenta años. Además, agentes como el tabaco, café, té, vino o incluso determinados medicamentos, pueden actuar de manera determinante sobre la tonalidad de nuestros dientes, haciendo que con el paso de los años lleguen a presentar un color más oscuro o con manchas.
Trucos naturales para Blanquear ?
Existen multitud de trucos y consejos naturales que prometen una dentadura blanca. Enjuagarse con agua oxigenada, o cepillarse los dientes con bicarbonato y limón, son soluciones que hemos oído durante años. Sin embargo debemos tomar estos remedios con muchísimo cuidado, ya que este tipo de sustancias van a provocar un debilitamiento del esmalte, por lo que aunque es cierto que pueden producir un cierto aclarado de los dientes, lo hacen a costa de su integridad, pudiendo producir daños irreparables.
Realmente, para reducir la tinción de los dientes, o la aparición de manchas, el único consejo válido es extremar la higiene y cuidado de los mismos. Un correcto cepillado varias veces al día, así como minimizar la exposición a los factores que hemos comentado antes, serán nuestros mejores aliados para conservar una boca con una apariencia bonita y saludable.
Cuidado con la ingesta de café, té, y sobre todo la nicotina por que también pueden oscurecer el esmalte dental.
Lo natural no siempre funciona.
De todas formas, si optamos por blanquear nuestros dientes, en cualquier clínica odontológica nos ofrecerán tratamientos adecuados y con todas las garantías. Allí nos realizarán un estudio que determinará el tratamiento más adecuado en cada caso. Es fácil obtener resultados satisfactorios en un período de tiempo muy corto. Sin embargo debemos tener en cuenta que estos tratamientos no son permanentes, y sobre todo que si seguimos expuestos a los agentes causantes del oscurecimiento dental (tabaco, café….), en unos meses los dientes volverán a su tonalidad original.
En cuanto al tratamiento en sí, no tiene contraindicaciones serias, salvo un incremento en la sensibilidad los primeros días. No obstante no es aconsejable abusar de este tipo de prácticas, ya que si se repiten con cierta frecuencia, pueden llegar a producir un debilitamiento en el esmalte, que puede convertir el exceso de sensibilidad en crónico.
En definitiva, una dentadura blanca no es sinónimo de una boca sana, siendo muchas veces preferible tener unos dientes ligeramente amarillentos pero sanos, que unos dientes blancos pero debilitados. Por último, recalcar la importancia de extremar el cuidado de nuestra dentadura, así como la de ponernos en manos de profesionales en caso de decidir realizarnos un blanqueamiento dental. Conseguiremos de esta manera mejores resultados, evitando posibles complicaciones.