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Agosto ha quedado atrás y con él las vacaciones y las playas soleadas sin horarios. Con la llegada del mes de septiembre y la vuelta a la rutina del trabajo, no es de extrañar que un 35% de la población sufra el síndrome post-vacacional.
Según comenta Anabel Romero Sánchez, psicóloga de QMS para la página Vivir Mejor, este síndrome asociado a la vuelta a la rutina afecta normalmente a personas de entre 20 y 45 años, sin importar su sexo. Son más propensos los caracteres sensibles y muy perfeccionistas, y más todavía si no se está a gusto con el trabajo que se ocupa. Pueden darse también casos de niños que sufren síndrome post-vacacional por la vuelta al colegio, pero no es muy habitual.
Suele afectar al estado de ánimo, provocando un cuadro de cansancio y hastío. Muy a menudo provoca insomnio, lo que conlleva a un mayor cansancio durante todo el día y a la pérdida de concentración y tolerancia hacia las tareas laborales. En general los síntomas se asemejan a un cuadro depresivo, y hay que vigilar que este síndrome post-vacacional no se alargue en un tiempo mayor a dos semanas, ya que podría desembocar en una depresión.
A continuación se presentan diez sencillos consejos para prevenir y superar el síndrome post-vacacional y volver a la rutina con energía:
- Repartir las vacaciones durante el año:
Según los expertos, el mejor remedio para este síndrome post-vacacional es la prevención del mismo, y la mejor manera de anticiparse es dividirse los días de vacaciones a lo largo del año. De este modo el cambio de rutina no es tan prolongado en el tiempo y también nos sentimos más motivados al tener otro periodo de descanso cerca en el calendario. Incluso se recomienda organizar algún viaje durante el año para mantener la mente ocupada en algo positivo. - Volver del destino vacacional algunos días antes del fin de las vacaciones:
Para minimizar el cambio repentino de la playa a la oficina, se recomienda volver a casa unos días antes de empezar a trabajar. El objetivo es adaptarse poco a poco a la nueva rutina.
- Adaptar los horarios progresivamente:
La rutina diaria requiere de unos horarios estrictos que no se suelen seguir durante las vacaciones. Para adaptarse mejor al cambio se recomienda madrugar un poco y trasnochar menos los últimos días de vacaciones. - Evitar las siestas los primeros días de vuelta a la jornada laboral:
Uno de los principales síntomas del síndrome post-vacacional es la falta de sueño por las noches y el consiguiente agotamiento durante el día. Para romper este bucle la psicóloga Lilia Hernández del Castillo, del Hospital Nisa Pardo de Aravaca en Madrid recomienda evitar la siesta, y así llegar cansado a la noche y dormir sin problema. - Mantener algún hobby o afición adquirido en las vacaciones:
Ante el fin de las vacaciones, es inevitable la reducción del tiempo libre, pero éste puede optimizarse siguiendo algún entretenimiento o afición que se haya adquirido durante el periodo vacacional, según argumenta la Clínica DAM de Madrid. No tiene porque ser algo complicado: desde salir a hacer senderismo hasta cocinar o ver la nueva serie de éxito. - Ordenar la zona de trabajo al gusto y organizar la agenda:
Otro síntoma muy extendido de este síndrome es el hastío y la intolerancia hacia las tareas laborales. La forma de afrontar con optimismo la jornada es sentirse a gusto con el entorno de trabajo, y evitar las acumulaciones y montones de tarea en la mesa. Organizar una agenda puede ayudar a minimizar la sensación de carga de trabajo. - Proponerse a uno mismo pequeños objetivos:
Como hacen los corredores de una maratón, es más motivador ante una larga meta proponerse objetivos más cortos o sencillos. Esta fórmula en el terreno laboral conseguirá una mayor sensación de triunfo y hacer la tarea menos pesada. El nivel de esfuerzo de estos objetivos puede ir aumentando progresivamente. - Organizar salidas y planes:
Es muy importante separar la vida profesional de la personal, y el tiempo de trabajo del tiempo de ocio. Se sentirá más motivado ante la vuelta a la rutina si después del trabajo puede salir a cenar y relacionarse socialmente. - Tomar fruta y verdura:
La buena alimentación es un componente fundamental en el estado de ánimo. Tomar cinco piezas de fruta y verdura al día ayudará a conseguir los nutrientes necesarios para vencer el agotamiento y sentirse positivo.
Hacer ejercicio:
- La psicóloga Lilia Hernández del Castillo también destaca la importancia de hacer deporte durante este periodo de síndrome post-vacacional, ya que el ejercicio físico nos ayuda a liberar endorfinas, la conocida como hormona de la felicidad que reduce el estrés y mejora el estado de ánimo.
http://www.vivirmejor.com/sindrome-post-vacacional-como-superar-la-vuelta-al-trabajo
https://www.clinicadam.com/blog/consejos-sindrome-post-vacacional.html
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