Tipos de parto ¿Ya sabes como nacerá tu bebé?

Cuando llega la feliz noticia de un nuevo embarazo, empieza la cuenta atrás llena de preparativos y planificaciones para el hijo que viene en camino. El momento final de dar a luz también requiere preparación, y es que parir es el paso más importante, el cual dejará un recuerdo en la memoria de los padres de por vida.

Existen distintas formas de parir, según factores como el ambiente o los medios utilizados para soportar el dolor. A continuación comentamos algunas formas de parto muy populares, con sus pros y contras, para que puedas elegir la que más se adecua a tus gustos y necesidades. Sobretodo los padres siempre han de estar convencidos del método de parto que van a realizar, ya que se trata de un momento crucial para la salud de la madre y el bebé. Por esta razón debe consultarse la forma de parto siempre con el médico para que éste aconseje el mejor método teniendo en cuenta el historial y características del embarazo.

Tipos de parto: nuevos ambientes y alternativas al dolor del parto

Parto natural

Muchas madres prefieren no hacer uso de anestesias y calmantes para el dolor, ya que quieren optar por un parto lo más natural posible. Existen clínicas sanitarias especializadas en parto natural, donde se puede parir de forma natural pero en un entorno clínico preparado para ofrecer todas las necesidades médicas que se puedan requerir.

Por supuesto, al negarse a recibir calmantes como la conocida epidural, los dolores del parto serán muy intensos. Para disminuir el dolor existen alternativas como técnicas de relajación, posturas específicas, hipnosis o incluso acupuntura.

Parto por cesárea

Este método debe realizarse sólo bajo prescripción médica. Actualmente lo están llevando a cabo entre un 25% y un 28% de las mujeres embarazadas, pero presenta cierto riesgo como todas las intervenciones quirúrgicas. Al realizarse con anestesia, el dolor es mínimo o inexistente, lo cual lleva a muchas mujeres preferir este método. Pero no depende de las preferencias de la madre, sino del riesgo que presentaría el parto natural en cada caso.

Parto en el agua

El parto acuático es una alternativa dentro del parto natural, ya que no necesita calmantes ni anestesias. Se desarrolla dentro de una bañera o piscina en agua tibia, donde, con ayuda de la matrona, se da a luz dentro del agua. El principal beneficio de esta forma de parto es que el recién nacido al salir se encuentra en una sensación similar a la que sentía dentro del vientre de su madre. Además, resulta más relajante para la madre y en consecuencia el parto es más rápido y menos doloroso.

Parto en casa

Cada vez más mujeres optan por esta técnica de antaño. Como en su día lo hicieron sus abuelas, muchas futuras madres optan por la comodidad de su hogar para dar a luz, aunque actualmente este sistema es muy diferente, ya que es necesario contar con la supervisión de un especialista por si se sucede cualquier complicación. Es una forma de parto natural, en el cual suele ser doloroso y largo, y para mitigar el dolor se hace uso de posturas y masajes relajantes.

Silla de parto

Esta forma de parto natural utiliza la fuerza de la gravedad para facilitar el proceso. Se realiza en unas sillas especiales que hacen a la mujer embarazada estar en cuclillas. De esta forma se consigue un parto natural más rápido, pero existe el riesgo de que la presión que ejerce el bebé al salir provoque desgarros en el perineo, los cuales conllevan una larga recuperación.

 

Éstas son las principales formas para dar a luz. Ahora sólo falta elegir la que más cómoda y segura le haga sentir, y esperar con ganas que llegue el día de ver la cara de su bebé.

 

Fuentes consultadas para el artículo «Tipos de parto ¿Ya sabes cómo nacerá tu bebé?»:
Crecer Feliz
Mi bebé y yo