Seguramente has escuchado alguna vez hablar de cálculos en el riñón y de cólico nefrítico. Bien, los cálculos renales son sustancias en forma de arenilla que van obstruyendo el conducto que va desde los riñones hasta el tracto urinario. Si los riñones no pueden eliminar esa arenilla, se van formando unas piedras en la zona, es decir, los cálculos renales.
Síntomas del cólico nefrítico
Cuando una persona padece esa obstrucción, es decir, un cólico nefrítico, tendrá un síntoma muy claro de dicho problema: un dolor muy agudo y de forma repentina que se localiza en la zona inferior de la espalda.
Este dolor no se calma ni cambiando la postura, incluso la mayoría de las mujeres que ha sufrido un cólico nefrítico ha asegurado que es mucho peor que un parto. Es un dolor muy brusco que comienza en la zona lumbar y se va extendiendo en función del grado de obstrucción que tenga el paciente. Además de este dolor agudo e intenso, también se producen vómitos y agitación.
Padecer cálculos en el riñón pueden evitarse si se toma mucho líquido (agua), pues de esta forma se ayudará a la eliminación más fácil de los cálculos.
Qué es una Pielonefritis
Cuando esta infección se complica y se transforma en una infección aguda del riñón y de las vías urinarias, estamos hablando de una pielonefritis.
Además de producirse por una complicación de los cálculos renales, la pielonefritis también puede deberse a otras causas como diabetes, tumores en la zona de la vejiga o reflujo vesicouretral.
Síntomas de la pielonefritis
En caso de sufrir de una pielonefritis, la persona que la sufre contará con un fuerte dolor en el costado. Más concretamente se encontrará localizado en la zona de debajo de las costillas pero por la parte inferior de la espalda. Además de este dolor, con una pielonefritis también se tendrá fiebre alta (más de 39º C) y puede llegar a sufrir de temblores, escalofríos, vómitos y náuseas. En muchas ocasiones, también podrá tener la orina turbia y con restos de sangre. Incluso puede que huela mal o muy fuerte.
Diagnóstico y tratamiento
Cuando acude al especialista con estos síntomas, la pielonefritis será diagnosticada por el médico a través de una analítica de sangre. En dicha analítica se podrá detectar la cantidad de glóbulos blancos y, a través de un cultivo, qué tipo de bacteria tendrá.
Si el médico le diagnostica una pielonefritis entonces será tratado, por una parte, con antibióticos para la infección bacteriana. Y por otra parte, le dará analgésicos para la fiebre y el dolor. Durante los primeros días que tenga que llevar este tratamiento, también le indicará que tome suero para que tenga una mayor hidratación en el organismo. De esta forma podrá recuperarse de manera más rápida, al llegar los medicamentos más pronto a los riñones y toda la zona afectada.
Lo mejor es beber mucha agua para que sea mucho más fácil eliminar los cálculos en el riñón y, que no se pueda complicar con una pielonefritis.
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